Muchos años antes de la conquista del continente americano (en 1492), ya se cultivaba cacao en México y América Central. Ahí crecen los granos de caco en un árbol pequeño. Los habitantes indígenas de México fueron los primeros que produjeron el chocolate con los granos de cacao. Los españoles enviaron cacao junto con recetas para una bebida hecha de chocolate a Europa. La bebida se hizo de la manera siguiente: Se tostaban los granos y se los molían. Luego este polvo se disolvía con agua. Finalmente se batía la mezcla hasta que se volviera espuma. Esta receta es un poco diferente a la de los aztecas. Ellos molían los granos tostados junto con maíz y añadían vainilla. Con esta masa y agua produjeron una bebida que podía ser espesa o más fluido, caliente o fría.