El maguey crece y madura entre 8 y 12 años. En la cosecha se arrancan las hojas y espinas de la planta dejando solo el corazón que parece una piña. El corazón es asado, prensado y después exprimido para extraer el jugo, al cual se le agrega azúcar. La mezcla se deja fermentar por cuatro días y luego se la destila dos veces. Después el tequila es añejado en barricas de madera. El producto final es un líquido transparente

Ya antes de la colonización mexicana el maguey tenía una importancia grande para los pueblos indígenas. Para los Otomíes el maguey no era alimentación sino un remedio para enfermedades y material de construcción. Con las hojas se cubrían los techos de las casas mientras que se producían cuerdas de las fibras. Con éstas se tejían arpilleras. También los aztecas y los mayas utilizaban el maguey de varias maneras. Las espinas funcionaban como agujas y las fibras como hilos.